Era de esperar que el Betis sufriese una derrota en el Camp Nou. Lo que no era de esperar es que lo hiciese del modo como ha sucedido.
La primera parte ha estado totalmente dominada por el club blaugrana. Eto'o en menos de 10 minutos ha marcado el primer gol, y no ha tardado en marcar, otra vez, el segundo. Por su parte, el Betis llegaba al área defendida por Valdés con cautela y, como en los partidos anteriores, sin tener suerte delante de portería.
Pero la segunda parte ha sido totalmente distinta. En el campo parecía que había dos equipos absolutamente diferentes de los que había en la primera.
El Barça, apagado, sin apenas acercarse al área verdiblanca. El Betis, por su parte, luchando por remontar un resultado que estaba en su contra. En el minuto 14 de la segunda parte, Monzón, desde un saque de falta, marca el primer gol del equipo andaluz.
El partido ardía. Seis minutos más tarde, se producía un penalti clarísimo a favor del Betis que el árbitro no ha pitado. Pero la justicia parece que existe, ya que solo un minuto más tarde, Jose Mari marcó su primer gol en el equipo bético (no marcaba desde el 2006). La lucha continuaba más por el equipo bético que por el catalán. Pero un gol de rebote de Gudjonhsen, a 10 minutos del final, hacía que el Barça volviese a estar por delante del marcador.
Los 10 últimos minutos del partido han estado muy intensos por ambas partes. El Barça buscaba el 4o gol, para no volver a tropezar con el 2-0. El Betis, por su parte, un empate realmente merecido que, por falta a acierto delante de la portería, no ha sido posible.
Se pueden decir muchas cosas de este partido, y seguramente yo no sería objetiva. Pero, desde mi punto de vista, el Betis no se ha merecido perder. Ha luchado con toda su alma, sobretodo en la segunda parte (quisiera saber que les ha contado Chaparro a sus jugadores para salir tan diferentes al campo). Aún así, los equipos grandes como el Madrid, tendrían que tener en cuenta que el Betis, cuando quiere, lucha. Y hoy ha hecho un buen partido. Solo le falta algo: el gol. Y algún día, espero que pronto, le llegará.
Como en todos los partidos, este ha tenido su anécdota divertida. Y es que cuando Gudjonhsen ha marcado el tercer gol azulgrana, Eto'o se ha acercado a Guardiola hasta empujarle. La cara del entrenador ha sido bastante curiosa, porque parece que no le haya hecho demasiada gracia el empujón de su jugador. A ver que respuesta da el entrenador...
Desde aquí espero que el Betis siga como ha hecho hoy, porque, para mi, ha hecho un gran partido, sin mucha suerte, pero lo ha hecho.